Acabado el 2013, el Gobierno presentó las últimas cifras e índices del mercado laboral. De manera optimista, el Ejecutivo dio a conocer lo que ha sido la menor caída de afiliados a la Seguridad Social de los últimos años y una reducción del paro récord: 147.385 en todo el año y 107.570 en el mes de diciembre.

 

La cifra de parados registrados en las oficinas de desempleo queda en 4.727.814. Ante esto se nos plantea una cuestión: ¿cuál ha sido el comportamiento del número de parados que incluye a los desempleados que no cobran prestación y que por lo tanto no están registrados en las listas del antiguo INEM? En el tercer trimestre del 2013, según el INE, esta cifra de parados disminuía en 72.800 personas y el total quedaba en 5.904.700, con una tasa de 25,98%. Terminamos el año 2012 con un total de parados de 5.965.400, lo que supone una tasa de 26,02%. ¿Suponemos entonces que la cifra de parados registrados ha disminuido porque simplemente ya no están registrados y se encuentran fuera del sistema de prestación?

 

El Ejecutivo, sin embargo, vaticina una recuperación inminente del empleo apoyados en las estadísticas de la EPA (Encuesta de Población Activa) según la cual se deduce que el sector activo de la sociedad aumenta. Pero, ¿aumenta porque los parados son contratados, o porque los desempleados se ven obligados a abandonar el país en busca de oportunidades en el extranjero? La contratación del 2013 ha subido un 3,9%, de 14.240.991 a 14.792.614, lo que son 551.623 contratos más. Sin embargo, solamente 83.792, un 6,5% de estos contratos son indefinidos. Los demás son de otras modalidades: a tiempo parcial, de prácticas, etc. Según los datos del Ejecutivo, la contratación tampoco ha sido uniforme: ha habido repuntes en las temporadas de verano y campaña de Navidad, lo cual reafirma el carácter fuertemente estacional de la contratación.

 

En cuanto a la emigración, España perdió 124.915 personas en el último año: 134.312 vinieron, pero 259.227 se marcharon. Pero estas cifras resulta todavía más sangrantes porque aumentan con respecto al año anterior: en 2013 vinieron un 11% menos de inmigrantes, y se fueron un 10% más personas.

 

La relativamente buena noticia la trae el número de afiliados a la Seguridad Social que ha registrado su menor descenso y caída de los últimos años, pero descenso al fin y al cabo, con un total de 85.041 afiliados menos. Comparada con años anteriores es un buen dato ya que en el año 2012 la caída alcanzó los 787.240, y en 2011, los 355.060.

 

El Gobierno promete recuperación para el 2014, pero los datos nos indican estabilidad dentro del estancamiento.